El sabado me chingué mi primer putin...

Pos si pues, ya me chingé mi primer poutine, ¿que qué es esa madre? ahhhh pos unas papas a la francesa con queso y una salsa que sabe bien chingona.

Original poutine quebecoi (en la parte superior se observa un fallido tamal mexicano)

Si, asi de simple es esa mamada, pero lo peor no es eso, lo peor es que la pinche receta se la estan peleando franceses, holandeses, belgas y quebecois, cada uno dice que le receta les pertenece; y de lo que se entera uno, asi nomas como pal anecdotario: que los belgas dicen que las papas a la francesa no son francesas, ¡quesque son belgas!

Pero la cosa no era discutir la historia del poutine, el punto es que les voy a platicar que está buenisimo, al principio, como cualquier persona conocedora en eso de la comida, tenia mis dudas sobre el antojito canadiense, al verlo y despues olerlo como que la cosa va cambiando, pero ya al probarlo uuuuta madre!! buenisimo, era como una fiesta de sabores en mi paladar, el queso completamente derretido, las papas fritas en su punto exacto... y la salsa, esa salsa color cafe claro tenia un sabor ex-qui-si-to.

Lo mas cagado de esto es que ese mismo dia que comi mi primer puotine se suponia que nosotros, los mexicanos que vivimos en esta casa ibamos a preparar una comida tradicional de nuestro pais para nuestros roomates quebecois, el pedo fue que los tamales no son un platillo como para iniciarse uno en esas cosas de la comida tradicional mexicana, no lo olvidaré nunca.

Tambien aprendi que una vaporera es insustituible por una cazuelota con una tapa en la base y que cuando un liquido se evapora crea un vacio que hace casi imposible retirar la tapa de la base de la cazuela ¬¬, lo bueno es que el ingenio humano se hizo presente y con solo un clavo y un martillo le abrimos un hoyo a la tapa y listo!, aprendi que unos tamales sin coccion saben a caca (no importa cuantas veces repitas en tu mente: saben buenos, saben buenos, saben buenos...), pero al menos eso me ayudo a adelantar mi encuentro con las papas a la francesa bañadas en salsa con queso derretido.

Cadaver del original poutine quebecoi